Hace no mucho leí que Isabel III de Madrid ha dicho que cada vez se oye menos la palabra "Navidad". Alucino, vecino. ¿Dónde vive esta señorita? desde luego no en España, no en Madrid. No sólo es un termino que se usa habitualmente sino que cada año la explosión navideña llega antes. "Que no nos secuestren la Navidad", dixit. Hace años que desde todas las instituciones y esferas se está paganizando la Navidad, pero la monarca madrileña no está atacando a El Corte Inglés por su Cortilandia por lo civil, por ejemplo. No. Eso da pasta a grandes empresas y eso a la invicta soberana no coronada le derrite las neuronas de gozo. No van por ahí los tiros. Lo sabemos.
Se me ocurre una reflexión paralela a lo dicho. Es posible que en su ámbito personal no se escuchen términos como Navidad, dado que no parece que ella misma respete mucho los principios religiosos que inspiran la Navidad. Al fin y al cabo, vive en concubinato. Cosa que, según su santo patrón no sólo es pecado sino además, delito. Vamos, que si hubiera nacido años antes estaría en la trena.