La Primavera por Boucher.
Ya sabéis que tengo debilidad por este siglo XVIII de mis entresijos y que, aunque n lo parezca ha llegado la primavera asi que permitidme ponerme cursi, y cursivo, en esta entrada, descanso de la anterior que no fue parto fácil.
VErdaderamente, tienes un gusto exquisito.. jajaja! El XVIII fue sublime...
ResponderEliminar¿Esa pintura no podría estar en mi salón?
Besos!!
jja pues descansa, descansa, pero ten cuidado con las alergias y con las gripes, pq la primavera habrá llegado pero hace un tiempo fatal..., pero que antes en el invierno.
ResponderEliminarBezos.
Mi gusto está más cercano al Impresionismo, pero es admirable la delicadeza y la dulzura de esta pintura dieciochesca, es como estar en un sueño. Besos.
ResponderEliminarAngel: no sé si tengo un gusto exquisito, lo dudo pero el XVIII me fascina. En mi salón la querría yo pero no pega con la tele.
ResponderEliminarThiago: en Madrid la primavera es como una de esas princesas renacentistas con un puñal en una mano y con el veneno en la otra. Dispuesta a asesinarte de una u otra manera.
Rober: nos han educado en otro tipo de pintura más "Moderno" pero ese glamour del XVIII no lo iguala nadie, quizás por que estaba tan cerca de la guillotina y tan ignorante de ella.
Gracias por leerme.
Me has recordado un mueble modernísimo, diseñado por mi, que encargué a un carpintero y al que, ya de su cosecha, este le añadió unos tiradores (6) que reproducían ese cuadro de Watteau de la dama en el columpio de flores. Cómo lloré.
ResponderEliminarUno: ¡hala! comprendo que no sea... en fin lo menos hortera del mundo pero hombre tampoco hay que pasarse.
ResponderEliminarEl XVIII, es cierto que para muchos peca de cursi, no para mi. Sencillamente buscaba el goce sin preocupaciones, no sabían la que les venía encima.
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