Entre las infinitas barbaries que nos rodean esta es una de las más lacerantes y estúpidas. Quisiera hablar más detenidamente de ella pero no sería políticamente correcto buscar culpables ni responsables. Sólo recordar que hoy, en el tercer milenio, todavía se practica esta salvajada; ah, y que no es patrimonio exclusivo del Islam ni cosa parecida. En el s. XIX se prácticaba con relativa frecuencia en la buena sociedad europea.
La imagen es bella, las que he encontrado relativas al tema más directamente son demasiado brutales para soportarlas.
Cierto, la imagen es muy bella. El "asunto", por llamarlo de algún modo es algo tan salvaje y lamentable que no me sale ningún comentario que no sea una ristra de insultos.
ResponderEliminarLo que no sabía es que también se había practicado en Europa hasta hace tan poco...
Un besote.
Pues sí, Theodore, y apoyado por la "ciencia" médica de la época que, a la sazón, parecía apoyar cualquier cosa.
ResponderEliminarUn abrazo
Prácticas bárbaras y brutales que pretenden sojuzgar a la mujer, aunque la única forma de luchar contra esto es la educación.
ResponderEliminarLa peor cara de la humanidad y su intento de anular a la mujer.
ES algo tremendo, es que no lo puedes concebir, verdad? pero a qué mente más enferma se les ocurriría inventar eso... Yo pensaba que no había nada más absurdo que la Iglesia Catolica..
ResponderEliminarEso sí, cari, he leído que, efectivamente no es algo consustancial al Islam (aunque si lo prohibiera expresamente avanzaríamos mucho, eh) que es una costumbre de todo África, pero nunca he escuchado o leído que se practicara en Europa, la verdad.
Bezs.
Hasta hace relativamente poco (ese relativamente no sé específicarlo) era práctica de los coptos, cristianos. Sí, hay documentación de que cuando los instintos de la mujer eran evidentes se veia aconsejable esta práctica en las damitas del XIX. Si queramos o no estamos a un paso del abismo hacia adelante y hacia atrás.
ResponderEliminarGracias y un abrazo