Bueno, pues ya estamos liados con lo de siempre: que si es una fiesta yanki, que si no se sabe por que se celebra, que qué tontería. Hay una cosa en la que estoy de acuerdo, cualquier fiesta en la que haya orgías de cuerpos desnudos me parece genial y ¿Dónde hay que apuntarse?
Lo malo es que no va por ahí.
El común de los españolitos, gracias a una intensa labor de desinformación global durante casi setenta años, ha olvidado que la fiesta de esta noche siempre se ha celebrado. Es de origen celta y se llama Shamain, creo recordar. De siempre, incluso en zonas tan poco célticas como Andalucía la tradición del vaciado de calabazas y demás ha existido. ¿Qué ha ocurrido pues para que esta tradición milenaria y precristiana sea considerada hoy una importación yanki? Pues varias cosas importantes, sutiles y útiles a según quien.
La primera es, como siempre en este país, que a partir de determinado momento (ya sabemos cual) las celebraciones con disfraces eran perseguidas, salvo si era Semana Santa y siempre con los encapuchados perfectamente identificados como cuando no recuerdo que ministro del aznarato salió "de incognito" en la procesión general de Valladolid y se enteró hasta el gato, o en eventos como los Bailes del Círculo de Bellas Artes (y equivalentes, casinos de pueblo etc)
Por otro lado tienen toda una carga no del todo cristiana y ya sabemos como funcionaba el nacionalcatolicismo sobre el tema.
A todo esto sumemos la ignorancia deliberada, la desinformación general y la invasión mediante la televisión más que el cine (en el cine, al menos en el Gran Cine, la celebración de Halloween no aparece seriamente hasta los setenta) de la forma yanki de la celebración, como todo lo yanki viciada y deforme. Resultado: que parece una creación yanki -si, en sí misma es una contradicción esta frase pero de algún modo hay que decirlo- lo que no es sino una mala reinterpretación que al ser digerida aquí tomó sus peores rasgos.
Afortunadamente ya hay gente que se está ocupando de eliminar elementos sobrantes en busca de la celebración más puramente céltica, sobre todo en Galicia, donde todo se presta para ello.
Hay un par de elementos más que tener en cuenta. la venta desmedida de artículos para esta fiesta (especialmente para las fiestas en los colegios) y la excusa para el pendoneo y la borrachera que supone.
No creo que los colegios deban emplear horas lectivas en fiestas cuando tan necesitados están los alumnos de que les enseñen algo (el otro día escuché a unos chavales de unos 16 años debatir cual era el río más largo de Galicia ¿un poco talluditos para esas preguntas en un examen que era de lo que venían hablando, no?) Esa la primera, lo malo es que denota un mal sistema educativo y una no excesiva preocupación del profesorado (seguramente atado de pies y manos por los delirios de los sucesivos planes de estudios)
En cuanto a la segunda sólo una anécdota. Ayer estuve en uno de esos inmensos bazares chinos. La mitad está ocupada por elementos para la fiesta y mientras yo buscaba una pieza para cubrir un hueco en un centro navideño llevaba detrás a tres jovencitas buscando cosas para disfrazarse. En fin que las respetables damas de la noche (lease putas) de la calle de la Ballesta serían auténticas Ladys al lado del tono arrastrado de las "inocentes criaturitas".
Pues ya tenemos todo lo necesario para la fiesta de esta noche, yo para asustarme a gusto pondré el telediario y escucharé a los próceres de la patria ante los que los tradicionales monstruos de toda la vida (Santa Compaña incluida) son hermanitas de la caridad.
Que ustedes se asusten bien.
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